jueves, 11 de octubre de 2007

Y el gallo cantó...


No creímos que ocurriría,pero el gallo cantó,un poco después que tú y yo lo negamos por décima vez en un solo día.

"Yo no te negaré mi señor"-,dijiste cuando te enteraste que uno de sus discípulos lo había hecho-¡Yo no te negaré jamás !-exclamaste con la seguridad de un recién convertido,y sé que eras sincero .

Pero hicimos aquello que un día dijimos que nunca pasaría:En la mañana oraste fervoroso y dijiste que todas tus palabras y tus actos le honrarían a El primeramente.Yo dije que en mí verían su amor y su grandeza en medio de la maldad que azota a mi país.

Un conductor imprudente te hizo vociferar indignado,y luego pensaste mal de las autoridades municipales que nada hacen contra" la impunidad de los empresarios del transporte público" cuyos autobuses parecen chimeneas ambulantes contaminando el ambiente.

miraste de reojo varias veces a las mujeres jóvenes que atravesaron tu camino,y simulaste no estar interesado en los transeúntes.

Yo vi nuevamente los posters gigantes de los candidatos a elecciones locales,y dije en voz alta-¡Hipócritas mentirosos ! ¡ corruptos y deshonestos! ¡ A prisión con todos ellos!.

En el banco te encontraste a un miembro de tu congregación al que cada domingo llamas "hermano amado" y solo le saludaste con un "buenos días,que le vaya bien",pues el banco estaba lleno de gente que los observaba.

Yo hice una oración más veloz que la "Fast-Food" que ordené,pues me sentí un poco"incomodo" entre tantos clientes del lugar.

Cuando llegaste al trabajo entraste caminando con tal porte para que todos pensaran al mirarte-"Ese hombre es diferente,mejor que cualquier otro"-Porque aprendiste a decir que eres un "Hijo del Rey".

Yo me quedé callado cuando unas personas cerca de mí discutían sobre" asuntos religiosos" porque aprendí a "Respetar las creencias de los demás",y los dejé en sus errores conociendo la verdad.

En la reunión vespertina volviste a descalificar al hermano que dio la enseñanza,y pensaste que "con seguridad yo lo haría mejor".

Yo me puse a corregir las faltas de los demás porque " A la luz de las escrituras.." estaban "equivocados".

Le demandaste a tu esposa que se sujetara a ti " Como dice La Palabra",y omitiste recordar... "Como a vaso más frágil traten a sus esposas".

Yo me sentí "fatigado" de ser un esposo fiel,sin considerar que mi esposa tiene las mismas pruebas.

Finalmente por la noche pasaste más tiempo frente a la computadora,que en tu oración cotidiana antes de irte a dormir.

Yo hice lo mismo que tú,pero con una variante.-"Si mañana me permites vivir,te honraré solo a ti mi Señor y mí Dios"-dije en sincera oración...y el gallo cantó.

1 comentario:

Carlos Julio dijo...

Preciosa reflexión hermano.

Así somos todos nosotros. La maldad que hay en nuestra carne a veces (por no decir todos los días) nos hacen pecar en hecho o pensamiento contra el Dios Todopoderoso.

Justo esta mañana, tuve un intercambio de palabras con mi esposa y eso me remuerde cada minuto hoy que estoy en mi trabajo.

Uno piensa que no le sucederá, pero lastimosamente caemos nuevamente.

Recordar que en el ciel está el Soberano que con su Santo Espíritu nos puede ayudar si a Él nos remitimos.

Bendiciones desde Ecuador

Carlos Julio