Tumba Vacia

Sé que puedo vivir confiado y seguro,tal como tú lo haces.Sé que al mirar las montañas y los arboles frondosos,las aves que llegan a mi patio y la lluvia intermitente,al igual que tú, doy gracias.
Sé que cuando veo a los ojos de mi esposa,y mi reflejo se hace grande,el amor no cesará.
Sé que al mirar hacia el cielo,veré las nubes juguetonas cobijadas en azul.Sé que la noche vendrá trayendo paz a mi sueño,así como tú descansas en tu lecho cada día.
Sé que mañana habrá alimento en mi mesa y en la tuya,y que las flores seguirán vistiéndose de hermosura.
Sé que vendrán terremotos,huracanes y aflicciones,pero tal como tú confías,estaré también confiado.
Sé que al leer su Palabra lloraré por gratitud,como lloras tú al saberte perdonado y redimido.
Sé que mis generaciones gozaran de la promesa,como gozan ya las tuyas cada promesa cumplida.
Sé que habrá mas gozo en el cielo por cada hijo que regrese,pues tú y yo vemos con gran gozo la respuesta al llamamiento.
Sé que más hombres y mujeres hallaran al que buscaban,como tú y yo Lo encontramos cuando clamamos a El.
Sé que más matrimonios serán restaurados del todo,y más jóvenes y niños tendrán una vida abundante y bendecida.
Sé que el que odiaba y maldecía,tendrá un corazón de carne,y el que buscaba el amor entre los brazos ajenos,encontrará el verdadero , abrazándose a la cruz.
Sé también,con gran certeza,que un día Le veremos,al que vive por los siglos,al que murió y resucitó,pues ,
¡ la tumba está vacía !

Solo en casa

Mi esposa está de viaje por dos semanas.Después de su visita programada al medico, en la capital del país;siguió de viaje con la familia de su hermano menor.
Me he tenido que quedar,entre otros motivos,para cuidar al perro de la casa,las plantas,los arboles (las hormiga planean un ataque a mi árbol de tamarindo) y atender a los huéspedes de las tres casas que administro.
Ayer me encargué de la lavandería casera,después el aseo general y la cocina.Mientras lavaba los platos de mi cena sentí un dolor en la zona lumbar,esto es lo que muchas veces suele decir mi esposa y ahora la entiendo;llevar un hogar no es tarea sencilla.Admiro aún más a todas las mujeres que llevan esta carga tan pesada.¿Que sería de nosotros pobres e insufribles hombres sin ellas? No lo digo por que solo se encarguen del trabajo del hogar,sino porque ciertamente son la ayuda idónea y vienen con bono extra:Su amor y ternura.
Estoy feliz porque mi esposa está tomando vacaciones,me alegra saber que se está divirtiendo y conociendo lugares interesantes, y después de una semana de no verla ya la extraño mucho.
No he estado ocioso y sin actividad,mientras ella regresa estoy haciendo algunas remodelaciones en la casa,sé que va a estar muy contenta cuando las vea.
Alguien dijo que el hogar es donde radica el corazón,otro dice que es donde escuchas por primera vez los cuentos infantiles,otros dicen que el hogar está donde enterraron tu ombligo.Yo sé que mi hogar es aquí,en la bendita porción de heredad que Dios nos regaló.Aquí donde hilvano y tejo mis días maduros,acompañado de la mujer que amo.
Y todo esto es mérito de Dios,no mío,ya que sin El mi vida estaría seca y sin fruto.
Pensé en mi esposa y le dí gracias a Dios nuevamente,pues toda mi vida y lo que pasa en ella es una bendición inmerecida;ganada con sangre en una Cruz.

AURORA

Aurora tenía un corazón antiguo,tan antiguo como ella misma y tan parchado como una vieja llanta de bicicleta.
Cuando era niña solía esconder en la arena del camino hacia la escuela, las monedas que le daban para el recreo.Corría unos metros y luego regresaba apresurada para buscar sus monedas y las encontraba.
Cierto día su padre le dio una moneda de plata brillante,la cual escondió por el camino como hacía siempre,pero al volver a buscarla ya no la encontró.Busco por todos lados y por mucho tiempo y lloró desconsolada por la moneda perdida.
Unos años después perdió también el corazón,el hombre al cual entregó su cuerpo y su vida junto con todos sus anhelos se fue con otra mujer;dejándola sin amor y con cinco pequeños.
Aurora tenía un nombre que significaba el renovar de un nuevo día,pero su rostro reflejaba decepción y tristeza.Como un día de invierno apagado y frío.
Hizo volver la alegría y el calor a su cuerpo con tragos de alcohol,pero el bienestar era pasajero,y se alejó más y más de la vida.
Todos sufrían a su alrededor,pero ella no lo notaba,y así poco a poco fue quedandose escondida, como su moneda; por el camino de la vida.
Un hombre vino un día buscándola amorosamente,buscó entre los zarzales y entre los espinos,sus manos sangraron mientras removía la tierra que cubría a Aurora.El la sacó del polvo añejo y la limpió cuidadosamente y después,la colocó con ternura junto a su pecho.
Al igual que sus ovejas,tenía noventa y nueve en el redil,pero le faltaba una.
Aurora resplandece ahora como su nombre mismo,resplandece como una moneda de plata recién acuñada,y su corazón tiene un nuevo amor.